martes, 31 de marzo de 2020

A 150 años del fin de la guerra civil de los Estados Unidos.-a



El pasado no ha muerto. De hecho ni siquiera ha pasado”, escribió William Faulkner, el gran novelista sureño.

Estados Unidos conmemoró ayer el 150 aniversario del comienzo de la guerra civil, pero el debate sobre su significado y su impacto en el país del siglo XXI sigue abierto.
Sí, las heridas se han cerrado. Los estados confederados, económicamente postrados durante décadas, casi igualan ahora en riqueza a los estados el norte, que viven su propio declive industrial.
Desde los inmigrantes hispanos hasta la inmigración interna de afroamericanos que han regresado a los estados de sus antepasados, el rostro del sur se ha transformado. La identidad se ha diluido; los agravios también. Para muchos la guerra civil es más folklore que otra cosa.
En el 2008, la elección de Barack Obama cerró un círculo. En el país que en los años sesenta del siglo XIX estuvo a punto de desintegrarse en una guerra cruenta por el esclavismo y que durante un siglo más sufrió la segregación y racismo, un afroamericano llegaba la Casa Blanca.

Y así ocurrió que el 4 de noviembre de 2008, poco después de las 11 de la noche, horario del este: la guerra civil terminó, cuando un negro –Barack Hussein Obama– ganó suficientes votos electorales para convertirse en presidente de Estados Unidos”, escribió en The New York Times el columnista Thomas Friedman. El historiador David Blight, que ha estudiado la evolución de la memoria histórica de la guerra civil, leyó aquellas palabras y pensó:


  • “Oh, no, Friedman, vas un poco demasiado rápido...”.

“A la gente no le gusta decirlo de forma tan directa, pero en este país hay un racismo profundo y pertinaz. Y hay una batalla profunda, eterna sobre la relación entre el Gobierno federal y los gobiernos de los estados”, dice Blight. “La reacción a la elección de Obama –añade en alusión a la vigorosa oposición conservadora– ha sido aleccionadora, y a veces ha dado miedo”.
El recuerdo de la guerra civil se ha transformado con los años. En Raza y reunión. La guerra civil en la memoria americana, el profesor Blight muestra cómo en el medio siglo posterior a la derrota del sur esclavista el discurso predominante fue el de la reconciliación, sin reparar la injusticia que habían sufrido los cuatro millones de negros liberados.
Un elemento central en la reconciliación fue la romantización del conflicto: no hubo buenos ni malos, sino patriotas a uno y otro bando que luchaban por un ideal. La película Lo que el viento se llevó, de 1939, es la máxima expresión de este momento.
En 1961, el centenario de la guerra coincidió con el movimiento por los derechos civiles. Una parte del país vivía aún en un régimen de apartheid. La legislación de los derechos civiles, impulsada por Kennedy y Johnson durante aquella conmemoración, puso fin a la segregación legal.
Cincuenta años después, el racismo es tabú en la arena pública. Pero la marginación pervive. Y el orgullo sureño no ha desaparecido. ¿Cómo defender al sur sin ser acusado de racista? Relativizando el origen histórico de la guerra. En el 2010 el gobernador de Virginia, Bob McDonnell, y el de Misisipi, el posible candidato presidencial Haley Barbour, ambos republicanos, declararon oficialmente el mes de la Historia Confederada en sus estados sin mencionar el esclavismo. Después rectificaron.
Según un sondeo del instituto Harris, dos tercios de los blancos que viven en los viejos estados de la Confederación sostienen que el motivo de la guerra no fue el esclavismo sino los derechos de los estados frente al intervencionismo del Estado federal, un debate que se repite ahora ante las políticas del presidente Obama.
El historiador Harold Holzer explica que la secesión de los estados sureños en defensa de sus competencias desencadenó la guerra, pero lo que desencadenó la secesión fue el temor a la abolición de esclavismo, fundamental para la economía del sur.
La interpretación de la guerra es una cuestión de identidad. “Es muy difícil para un pueblo derrotado decir que su causa era mala”, dice Holzer.
Blight atribuye los problemas de EE.UU. con la memoria histórica a la necesidad de creer en una historia luminosa y excepcional, sin zonas oscuras. Y lo contrasta con Alemania, que ha asumido lo peor de su historia.

“La mayoría de americanos no quiere ver que nuestra historia es profundamente contradictoria, profundamente trágica, como la de cualquiera. No queremos creerlo de verdad”, dice Blight.



El 4 de marzo de 1865 Abraham Lincoln inició su segundo mandato presidencial pronunciando el tradicional discurso de toma de posesión y en el que hacía hincapié en una medida que iba a poner en marcha durante esa nueva legislatura (una de las pocas que le dio tiempo a llevar a cabo, ya que fue asesinado tan solo un mes después).

Lincoln se comprometía a que el Estado se haría cargo de pagar una pensión a las viudas y huérfanos de todos aquellos hombres que habían luchado y perdido la vida en la Guerra Civil Americana que ya estaba dando sus últimos coletazos y que llevaba en marcha desde hacía cuatro años.

Irene Triplett es la única persona que, 150 años después de acabarse la Guerra Civil Americana,
 sigue cobrando una pensión del Estado (imágenes vía Wall Street Journal – stonemangazette)

Una guerra que había enfrentado a más de tres millones de norteamericanos divididos entre Unionistas y Confederados y en la que habían resultado muertos más de medio millón de ellos. Pero también había que contar todos los miles de heridos que habían quedado con secuelas e incapacitados, por lo que el presidente acabó transformando esa promesa de pensión en un subsidio que percibirían los incapacitados de guerra y posteriormente las viudas y huérfanos de absolutamente todos los soldados que participaron en la Guerra de Secesión, luchasen en cualquiera de los dos bandos.
Ha pasado un poco más de un siglo y medio y la promesa de Abraham Lincoln se cumplió, además tomando el ejemplo en todos sus sucesores desde entonces, quienes han ido concediendo pensiones de viudedad y orfandad por todas las guerras que ha habido desde entonces hasta hoy en día.
Pero una de las curiosas anécdotas que dejó aquella promesa de pensión de Lincoln para viudas y huérfanos de combatientes en la Guerra Civil Americana es que a día de hoy, a pesar de haber trascurrido 150 años, hay una persona en Estados Unidos que sigue cobrando un cheque mensual de 73,13 dólares en concepto de orfandad de la mencionada Guerra de Secesión.
Se trata de Irene Triplett, una anciana de 89 años de edad (a día de hoy) y cuyo padre, Mose Triplett, nacido en 1846, luchó como soldado en aquella guerra. Lo hizo siendo un adolescente y además en los dos bandos. Primero en el Confederado y, posteriormente, desertó del ejército sudista para pelear junto a la Unión.
Mose Triplett, cuando finalizó la guerra no había cumplido todavía los 20 años de edad y poco después se casó con una mujer llamada Mary con la que tuvo un largo matrimonio de cerca de medio siglo, con la que no tuvo descendencia y quedando viudo de ésta en 1920.
Cuatro años después, cuando Mose Triplett contaba con 78 años de edad volvió a casarse y lo hizo con Elida Hall, una mujer cincuenta años menor que él y con la que tuvo una hija en 1930 a la que llamaron Irene (Mose, el padre, por aquel entonces ya tenía 84 años y falleció ocho después).
Esa niña, Irene Triplett, que hoy en día tiene 89 años, es la única descendiente directa de un veterano de la Guerra Civil Americana con vida y que sigue cobrando una pensión del Estado por un conflicto bélico en el que luchó su progenitor hace más de un siglo y medio.

Nota

Irene Triplett (Condado de Wilkes, 9 de enero de 1930-Wilkesboro, 31 de mayo de 2020)​ fue la última beneficiaria de una pensión de veteranos de la Guerra de Secesión estadounidense. Su padre había luchado tanto por la Confederación (1863) como por la Unión (1864) en la Guerra de Secesión.
Triplett nació en 1930, hija de Mose Triplett y Elida Hall.​ Su padre, que había luchado tanto por los Estados Confederados como por los Estados Unidos durante la Guerra de Secesión, tenía 83 años cuando se casó con su madre; su unión fue el segundo matrimonio de Mose Triplett. Irene Triplett creció en la granja de su padre en el Condado de Wilkes, Carolina del Norte.​ Según Triplett, sufrió una infancia difícil y fue golpeada regularmente tanto por sus padres como por sus maestros de escuela.​ Los compañeros de clase se burlaron de ella acerca de su padre, a quien denunciaron como un «traidor».
La educación de Triplett terminó en sexto grado y, en 1943, se mudó con su madre y su hermano a una casa de pobres, donde permaneció hasta 1960. A partir de allí no se conoce mucho sobre su vida adulta hasta llegar a la tercera edad, cuando comenzó a vivir en hogares de ancianos privados hasta su muerte.
Según conocidos, ella era una usuaria habitual de tabaco de mascar y era fanática de la música góspel.
Desde la muerte de su padre en 1938, Triplett recaudó $ 73.13 por mes del Departamento de Asuntos de los Veteranos.​ Era elegible para heredar la pensión de su padre debido a problemas cognitivos que sufrió, calificándola como la hija indefensa de un veterano. El monto total que recibió fue de aproximadamente $ 73 000 en 2020, o $ 344 000 ajustado por inflación.
La conciencia pública generalizada sobre el estado de Triplett ocurrió en 2013 como resultado de una historia del Daily Mail sobre ella.
Después de la muerte en 2018 de Fred Upham, hijo de William H. Upham, se convirtió en la última hija sobreviviente de un veterano de la Guerra de Secesión y, en consecuencia, la última beneficiaria sobreviviente de una pensión de la Guerra de Secesión.

Murió a los noventa años el 31 de mayo de 2020 en el hogar de ancianos Accordius Health en Wilkesboro, Carolina del Norte, como resultado de complicaciones derivadas de una cirugía.

lunes, 30 de marzo de 2020

Juego de tronos y la política.-a ; Las 50 leyes del poder


Las 50 leyes del poder para convertirte en El Padrino.

19/05/2023



El sociólogo, politólogo, escritor, podcaster y libretista de ópera chileno Alberto Mayol, tras una serie de derrotas personales en el ámbito laboral, empezó a comprender. 
¿Qué cosa comprendió este profesor universitario? 
Los mecanismos del poder. Las leyes que le habían apartado y dejado vendido para terminar escribiendo esta frase:
 «Mi asesinato fue sencillo».

El sociólogo chileno Alberto Mayol publica un ensayo sobre el poder en la sociedad actual de la mano de los Corleone, sintetizando en píldoras de sabiduría unas cuantas lecciones de vida y maquiavelismo para toda la 'famiglia'

En esta obra, que fue un éxito en Chile con más de 15.000 ejemplares colocados, Mayol razona que 'El Padrino', la prestigiosa trilogía de Francis Ford Coppola y la novela de Mario Puzo, es una actualización de 'El Príncipe' de Maquiavelo, recordemos un tratado para manejar el poder, un hito de la filosofía política. Y explica que la partida del poder se juega a diario, en el trabajo, en el amor, con los amigos, con el padrino de tus hijos inclusive. Y todos podemos, y el autor sostiene que debemos (si no, atenerse a las consecuencias), aprender a aglutinar cierto poder como autodefensa, conseguir una posición para no caer y para asegurarte seguir jugando. Y todo vía Corleone.
Porque Mayol, en su época como investigador universitario en Chile, según nos cuenta en esta entrevista, observó que sus colegas en las clases de Ciencia Política y Economía utilizaban situaciones de 'El Padrino' como ejemplo para explicar ciertas nociones, era muy habitual. Y desde el placer intelectual que le suscitaba, empezó a darle vueltas hasta que ha acabado desarrollado un libro con 50 leyes del poder como piedra filosofal para la perra vida en sociedad. Un manual para no fracasar, sección Mafia, Filosofía o 'Coaching'.
Y, aunque algunas quizá sean demasiado abstractas por lo que convendría leer el libro para conocerlas en profundidad, aquí van estas 50 leyes basadas en que «la lucha es fundamental en los seres humanos». Y si eres analfabeto en la materia, «tu desgracia está cerca», avisa el autor.

- Ley n.º 1

Todas las situaciones, condiciones y vicisitudes pueden ser una oportunidad y, por ello, cada circunstancia y lugar deben ser estudiados en detalle.

- Ley n.º 2

La pasión es enemiga del poder.

- Ley n.º 3

Todas las misiones que han merecido tal carácter son igualmente relevantes.

- Ley n.º 4

Las decisiones relevantes solo se discuten con quienes toman parte en la decisión.

- Ley n.º 5

Si hay que elegir entre la eficacia y la eficiencia de una decisión, elige la eficacia.

- Ley n.º 6

No toda acción debe responder a una estrategia, pero toda acción debe ser coherente con la estrategia.

- Ley n.º 7

Si un estúpido controla un imperio, tú puedes tomar ese imperio. A menos que seas más estúpido que aquel que controla el imperio (y no lo sepas).

- Ley n.º 8

Un gran táctico puede ser un pésimo estratega.

- Ley n.º 9

En una negociación nadie debe salir humillado.

- Ley n.º 10

Piensa como tus enemigos…

- Ley n.º 11

…Y que nadie sepa lo que estás pensando.

- Ley n.º 12

Desconfía de los mediadores, suelen tener un bando.

- Ley n.º 13

No hay nada, nunca, que sea más importante que la razón.

- Ley n.º 14

Nunca sabemos si el enemigo explícito es el enemigo último.

- Ley n.º 15

Los recursos deben ser usados en proporcionalidad a su relevancia.

- Ley n.º 16

Que tus actos sean predecibles en tiempos de paz e impredecibles en tiempos de guerra.

- Ley n.º 17

El culpable debe ser del tamaño del problema. Si no lo es, entonces no lo has encontrado.

- Ley n.º 18

Cualquier característica personal puede ser susceptible de convertirse en un recurso para acumular más poder.

- Ley n.° 19

Cuando un accidente se repite, es mejor ser supersticioso.

- Ley n.° 20

La prudencia es la mayor virtud del gobernante.

- Ley n.° 21

La arrogancia es el mayor pecado del que administra poder.

- Ley n.° 22

Hay cosas que simplemente se hacen y luego se olvidan.

- Ley n.° 23

Mucha de la información que recibes son mitos. Tener información propia es esencial.

- Ley n.° 24

En momentos difíciles, gana tiempo.

- Ley n.° 25

Todo grupo que aspira a acumular poder debe estructurarse con un carácter monolítico.

- Ley n.° 26

Es imperativo cuidar del propio mundo.

- Ley n.° 27

El respeto no es la mejor arma, pero es el mejor escudo.

- Ley n.° 28

La permisividad es una fuente de grandes problemas.

- Ley n.° 29

Quien perdona una traición siempre estará en peligro.

- Ley n.° 30

Nunca aceptes una humillación, salvo que tengas posición dominante.

- Ley n.° 31

Nadie es inmune a la transformación del poder y si eres inmune, sencillamente morirás.

- Ley n.° 32

Todo hombre tiene su destino.

- Ley n.° 33

El crecimiento de tu poder no se ha consolidado si la sociedad no se ha enterado. Pero no se pueden enterar por ti.

- Ley n.° 34

Nada es personal en el juego de los intereses. Pero al observar el panorama comprenderás que todo es personal.

- Ley n.° 35

No se debe resentir el darwinismo radical del poder.

- Ley n.° 36

Hay hombres para tiempos de paz y hombres para tiempos de guerra.

- Ley n.° 37

No se debe abusar de los recursos.

- Ley n.° 38

Cultiva el secreto y el poder crecerá estable.

- Ley n.° 39

Nunca se debe ostentar una negación y menos decir simplemente «no» a quienes se aprecia.

- Ley n.° 40

Un escenario de aparente debilidad puede convertirse en un problema real.

- Ley n.° 41

Desconfía de las situaciones extrañas.

- Ley n.° 42

Las historias verosímiles son un poder relevante.

- Ley n.° 43

El ejercicio del poder debe desplegarse con la mayor sutileza posible.

- Ley n.° 44

Todos los recursos son armas.

- Ley n.° 45

Hasta lo ilegítimo debe ser institucional.

- Ley n.° 46

El caos es el poder del lumpen.

- Ley n.° 47

Los favores articulan poder.

- Ley n.° 48

La posición es más importante que las piezas.

- Ley n.° 49

Abogados, abogados, abogados.

- Ley n.° 50

No hay poder en la mentira.

* Ley n.° 50 bis

La lealtad del pueblo es tan frágil o tan intensa como es la categoría del líder.

miércoles, 25 de marzo de 2020

Natalidad en mundo.-a

Natalidad en el mundo.

África.


Níger.                     2021      45,29‰
Somalia                       2021      43,56‰
Chad                     2021      43,36‰
Centroafricana             2021   42,68‰
R.D. Congo                 2021   42,05‰
Malí                             2021   41,64‰

Angola                         2021   38,81‰
Nigeria                         2021   37,12‰
Uganda                        2021   36,80‰
Benin                           2021  36,61‰
Mozambique             2021  36,60‰
Tanzania                      2021     36,21‰
Burkina Faso                2021  35,54‰

Camerún [+] 2021 34,94‰
Burundi [+] 2021 34,84‰
Zambia [+] 2021 34,51‰
Guinea [+] 2021 34,43‰
Costa de Marfil [+] 2021 33,93‰
Sudán [+] 2021 33,60‰
Gambia [+] 2021 33,26‰

Malaui [+] 2021 32,86‰
Senegal [+] 2021 32,57‰
Etiopía [+] 2021 32,38‰
Togo [+] 2021 31,86‰
Sierra Leona [+] 2021 31,36‰
Liberia [+] 2021 31,29‰
Guinea-Bisáu [+] 2021 31,09‰
Madagascar [+] 2021 30,95‰
República del Congo [+] 2021 30,69‰
Zimbabue [+] 2021 30,54‰ 3,4
Guinea Ecuatorial [+] 2021 30,50‰

Ruanda [+] 2021 29,98‰
Sudán del Sur [+] 2021 29,11‰
Eritrea [+] 2021 28,62‰
Santo Tomé y Príncipe 2021 28,26‰
Kenia [+] 2021 27,69‰
Ghana [+] 2021 27,55‰
Namibia [+] 2021 27,44‰
Gabón [+] 2021 27,14‰
Lesoto [+] 2021 26,11‰
Eswatini [+] 2021 24,13‰
Botsuana [+] 2021 23,58‰
Yibuti [+] 2021 22,21‰

Sudáfrica [+] 2021 19,82‰
Cabo Verde [+] 2021 16,95‰
Mauricio [+] 2021 10,30‰

Magreb, Libia y Egipto.


Mauritania 2021 33,19‰
Egipto 2021 22,56‰
Argelia 2021 21,52‰

Libia [+] 2021 17,83‰
Marruecos [+] 2021 17,55‰
Túnez [+] 2021 16,09‰

Asia


Afganistán         2021 35,84‰

Comoras [+] 2021 29,40‰
Pakistán [+] 2021 27,52‰
Tayikistán [+] 2021 26,75‰
Uzbekistán [+] 2021 25,90‰
Timor Oriental [+] 2021 24,94‰
Kazajistán [+] 2021 23,50‰
Kirguistán [+] 2021 22,40‰
Laos [+] 2021 21,97‰
Filipinas [+] 2021 21,81‰
Turkmenistán [+] 2021 21,59‰
Mongolia [+] 2021 21,41‰
Nepal [+] 2021 20,40‰


Camboya [+] 2021 19,33‰
Bangladés [+] 2021 17,82‰
Myanmar [+] 2021 17,10‰
Seychelles [+] 2021 16,80‰
Indonesia [+] 2021 16,43‰
India [+] 2021 16,42‰
Malasia [+] 2021 15,24‰
Viet Nam [+] 2021 15,01‰
Maldivas [+] 2021 14,09‰
Sri Lanka [+] 2021 14,02‰
Brunéi [+] 2021 13,80‰
Palaos [+] 2021 13,40‰
Corea del Norte [+] 2021 13,24‰
Bután [+] 2021 12,48‰

Tailandia [+] 2021 9,00‰
Singapur [+] 2021 8,60‰
China [+] 2021 7,52‰
Japón [+] 2021                                6,60‰

Corea del Sur 2022 4,90‰

ASIA OCCIDENTAL.

Asia Occidental , Asia del Oeste , Asia Suroccidental o Asia del Suroeste es una de las veintidós subregiones en que la ONU divide el mundo. Está compuesta por diecinueve paísesː Arabia Saudita, Armenia, Azerbaiyán, Baréin, Catar, Emiratos Árabes Unidos, Georgia, Irak, Irán, Israel, Jordania, Kuwait, Líbano, Omán, Palestina, Siria, Turquía y Yemen.


Yemen                             2021 30,54‰
Estado de Palestina  2021 28,24‰
Irak                              2021 27,37‰
Jordania                         2021     21,95‰
Siria         2021 20,11‰

Israel                      2021 19,70‰
Omán                           2021 18,42‰
Arabia Saudita      2021 17,47‰
Líbano [+]              2021 14,95‰
Irán [+]                     2021 13,70‰

Georgia [+]             2021 12,40‰
Turquía                     2022 12,20‰
Azerbaiyán                  2021             12,10‰
Armenia                      2021         12,05‰
Baréin                     2021 11,93‰
Kuwait                    2021 10,41‰
E. Á. U.                  2021 10,31‰

Catar                  2021 9,82‰

América 

Haití [+] 2021          23,50‰
Bolivia [+] 2021 21,84‰
Guatemala [+] 2021 21,12‰
Honduras [+] 2021 21,07‰
Paraguay [+] 2021 20,63‰
Nicaragua [+] 2021 20,51‰
Guyana [+] 2021 20,30‰

R. Dominicana 2021 18,43‰
Surinam [+] 2021 18,15‰
Belice [+] 2021          17,98‰
Panamá [+] 2021 17,69‰
Perú [+] 2021          17,62‰
Ecuador [+] 2021 16,82‰
El Salvador [+] 2021 16,03‰
Granada [+] 2021 15,96‰
Venezuela [+] 2021                 15,88‰
México 2021                         14,86‰
Colombia   2021                  14,20‰
Argentina [+] 2021 13,90‰
Dominica [+] 2021 13,33‰
San Vicente y las Granadinas  2021       12,90‰
Brasil 2021          12,88‰
San Cristóbal y Nieves 2021   12,13‰
Antigua y Barbuda [+] 2021  12,12‰
Costa Rica [+] 2021 11,87‰
Chile [+] 2021          11,79‰
Jamaica [+] 2021 11,71‰
Trinidad y Tobago 2021 11,69‰
Santa Lucía 2021 11,49‰
Bahamas 2021 11,45‰
Estados Unidos 2021 11,00‰
Barbados 2021 10,83‰
Uruguay 2021                         10,47‰

Canadá 2021                           9,60‰
Cuba 2021              8,92‰

Oceanía.

Islas Salomón 2021 29,79‰
Vanuatu [+] 2021 29,44‰
Nauru [+] 2021 27,56‰
Samoa [+] 2021 27,25‰
Kiribati [+] 2021 27,21‰
Papúa Nueva Guinea [+] 2021 25,51‰
Tuvalu [+] 2021 23,48‰ Tonga [+] 2021 23,05‰
Micronesia [+] 2021 20,78‰

Fiyi [+] 2021 19,35‰
Islas Marshall [+] 2021 19,28‰
Australia [+] 2021 12,10‰
Nueva Zelanda [+] 2021 11,48‰


Europa 

Islandia 2022 11,50‰
Montenegro 2022 11,40‰
Irlanda 2022 11,20‰
Chipre [+] 2022 11,10‰
Francia [+] 2022 10,60‰
Moldavia 2022 10,50‰
Reino Unido [+] 2021 10,10‰

Suecia [+] 2022 10,00‰
Dinamarca[+] 2022 9,90‰
Luxemburgo[+] 2022 9,90‰
Macedonia del Norte 2022 9,90‰
Bélgica 2022 9,80‰
Eslovaquia[+] 2022 9,70‰
Rumanía 2022 9,60‰
Rusia  2021 9,60‰
Chequia[+] 2022 9,50‰
Países Bajos 2022 9,50‰
Suiza [+] 2022 9,40‰
Noruega[ 2022 9,40‰
Hungría 2022 9,30‰
Serbia [+] 2022 9,30‰
Bielorrusia[+] 2021 9,28‰
Liechtenstein [+] 2022 9,20‰
Austria 2022 9,10‰
Albania 2022 8,90‰
Alemania[+] 2022 8,80‰
Bulgaria 2022                 8,80‰
Croacia [+] 2022 8,80‰
Estonia [+] 2022 8,60‰
Letonia [+] 2022 8,50‰
Bosnia y Herzegovina [+] 2021 8,42‰
Polonia [+] 2022 161.375 8,30‰

Eslovenia 2022 8,30‰
Finlandia  2022 8,10‰
Malta 2022 8,10‰
Portugal 2022   8,00‰
Lituania 2022 7,80‰
Grecia 2022 7,30‰
España 2022 6,90‰
Italia 2022 6,70‰
Ucrania 2021 6,60‰
Andorra 2022 6,20‰
San Marino 2022 6,10‰
Mónaco 2018 5,90‰



Juego de tronos y la política.-a ; Las 50 leyes del poder

vídeos sobre juego de tronos Las 50 leyes del poder para convertirte en El Padrino. 19/05/2023 El sociólogo, politólogo, escritor, podc...